Si vas a viajar a la capital argentina, nada mejor que comenzar a conocerla por sus barrios centrales. Allí surgió la ciudad y hoy siguen siendo el epicentro de la vida social, polícia y cultural bonaerense. Por supuesto, yo recorrí la zona durante mi viaje por Argentina y hoy te cuento qué hacer en el centro de Buenos Aires para que no te pierdas sus lugares más destacados.

Qué hacer en el centro de Buenos Aires
El centro de Buenos Aires es el lugar donde nació la ciudad y donde aún hoy se concentran su historia, su vida política y su identidad cultural. Su origen se remonta a 1580, cuando Juan de Garay fundó por segunda vez la ciudad y trazó un damero urbano con la Plaza Mayor (actual Plaza de Mayo) como punto central.
A su alrededor se levantaron los primeros edificios coloniales, como el Cabildo y la Iglesia Mayor, y desde allí se expandieron las calles que dieron forma al casco histórico. Durante los siglos XVIII y XIX, la zona fue el escenario de hechos decisivos, como las Invasiones Inglesas, la Revolución de Mayo de 1810 y los primeros años de la independencia argentina.
Con el paso del tiempo, el centro se transformó al ritmo del progreso económico y la influencia europea. A fines del siglo XIX y principios del XX, Buenos Aires vivió una modernización inspirada en París: se abrieron grandes avenidas como la Avenida de Mayo y la 9 de Julio, se construyeron edificios monumentales como el Teatro Colón y el Palacio Barolo, y florecieron cafés, teatros y librerías que le dieron su carácter cosmopolita. Hoy, el centro porteño combina esa elegancia de época con la vitalidad contemporánea de una metrópolis que nunca deja de moverse, manteniendo su rol como corazón político, cultural y simbólico de la Argentina.
No te pierdas el post sobre qué hacer sola en Buenos Aires para más información de la ciudad
Plaza de Mayo
Para comenzar tu ruta por Buenos Aires, nada mejor que hacerlo en la Plaza de Mayo. Nació junto con la fundación de la ciudad en 1580 y a lo largo de la historia ha sido escenario de manifestaciones, celebraciones y protestas que marcaron la vida política argentina, como la Revolución de Mayo de 1810, momento clave que marcó el inicio del proceso de independencia del país.
En 1945 fue el epicentro de la movilización popular que dio origen al peronismo, y décadas más tarde, durante la última dictadura militar, se convirtió en símbolo de resistencia gracias a las Madres de Plaza de Mayo, que comenzaron a reunirse allí para exigir la aparición con vida de sus hijos desaparecidos. Es un lugar cargado de memoria, donde el pueblo argentino ha expresado sus reclamos, sus alegrías y sus luchas por la democracia.

Casa Rosada
La Casa Rosada es probablemente el edificio más representativo de los que se encuentran en el entorno de la Plaza de Mayo. Es la sede del poder ejecutivo y la residencia oficial del presidente durante su jornada laboral. Es un edificio muy característico por su color rosado, que le da el nombre, y desde sus balcones se han dirigido al pueblo figuras emblemáticas como Juan y Eva Perón o Néstor y Cristina Kirchner, convirtiéndola en escenario de discursos que marcaron épocas.
El origen del edificio se remonta al siglo XIX, cuando en este mismo lugar se encontraba el Fuerte de Buenos Aires, construido por los españoles para defender el puerto. Con el paso del tiempo, el fuerte fue perdiendo su función militar y, hacia 1862, se instaló allí la sede del Gobierno Nacional. En 1873 se construyó el Palacio de Correos y Telégrafos en el terreno contiguo, y años más tarde ambos edificios fueron unidos mediante un arco central, dando lugar al actual conjunto arquitectónico que conocemos como Casa Rosada. El diseño final, obra del arquitecto Francisco Tamburini, combinó influencias italianas y francesas, reflejando el espíritu modernizador de fines del siglo XIX.
En la actualidad, la Casa Rosada no solo es un centro de poder político, sino también un espacio histórico y cultural abierto al público. En su interior funciona el Museo del Bicentenario o Museo Casa Rosada, que recorre la historia argentina desde la colonia hasta nuestros días, y los fines de semana se ofrecen visitas guiadas gratuitas que permiten recorrer los salones más importantes y conocer la historia del edificio.

Museo del Cabildo
Asimismo, el Museo del Cabildo, situado al otro lado de la Plaza de Mayo, frente a la Casa Rosada, es una visita muy interesante para conocer los comienzos de la ciudad de Buenos Aires y cómo se llegó hasta la independencia en 1816. Hice una visita guiada para recorrerlo y me encantó. Te lo recomiendo mucho para conocer los orígenes de la ciudad.
Su construcción comenzó a fines del siglo XVI, poco después de la segunda fundación de la ciudad, y durante siglos fue sede del gobierno local y de la justicia colonial. En su época, el Cabildo concentraba el poder político, administrativo y judicial del entonces Virreinato del Río de la Plata.
El edificio original ha sufrido múltiples transformaciones a lo largo del tiempo. Durante la época colonial tenía una torre central y once arcos, pero en el siglo XIX, con la apertura de la Avenida de Mayo y la Diagonal Sur, se demolieron sus extremos y parte de la torre, lo que modificó notablemente su aspecto. A pesar de ello, conserva gran parte de su estructura original y su inconfundible estilo colonial con muros blancos, techos de tejas y balcones de hierro forjado.
El 25 de mayo de 1810, el Cabildo fue el escenario principal de la Revolución de Mayo, cuando los vecinos de Buenos Aires se reunieron frente a sus puertas para exigir la destitución del virrey y la formación de un gobierno propio. Ese día marcó el inicio del proceso de independencia de Argentina, y desde entonces, el edificio quedó profundamente ligado a la historia nacional.
Actualmente, el edificio alberga el Museo Nacional del Cabildo y de la Revolución de Mayo, que conserva documentos, objetos y obras de arte relacionados con la vida colonial y los primeros años de la independencia. Entre sus salas se pueden ver mobiliario de época, retratos de próceres y utensilios cotidianos que permiten imaginar cómo era la vida en Buenos Aires en los siglos XVII y XVIII. Además, desde su terraza tendrás una hermosa vista de la Plaza de Mayo.

Catedral de Buenos Aires
Otro de los edificios que no se pueden pasar por alto en los alrededores de la Plaza de Mayo es la Catedral Metropolitana de Buenos Aires. Es la sede del arzobispado de Buenos Aires y fue el lugar donde ofició misa durante años el cardenal Jorge Bergoglio, antes de convertirse en el papa Francisco.
La historia de la Catedral se remonta a los primeros tiempos de la ciudad. Desde la fundación de Buenos Aires en 1580 existió una iglesia mayor en este mismo lugar, aunque el edificio fue reconstruido varias veces debido a derrumbes y deterioros. La estructura actual comenzó a levantarse en el siglo XVIII y se finalizó en 1827, cuando se añadió la fachada diseñada por los arquitectos Próspero Catelin y Pierre Benoit, de fuerte influencia francesa. En su interior se combinan distintos estilos artísticos: bóvedas barrocas, decoraciones renacentistas y vitrales coloridos que narran escenas bíblicas.
Uno de los espacios más destacados del templo es el mausoleo del general José de San Martín, héroe de la independencia argentina y libertador de América del Sur. Su tumba, custodiada por granaderos, se encuentra en una capilla lateral. Además, la Catedral alberga valiosas obras de arte sacro, retablos antiguos, tallas en madera y un órgano monumental con miles de tubos, considerado uno de los más grandes del continente.

Complejo Histórico Cultural Manzana de las Luces
Otro edificio donde conocer más acerca de la historia de Buenos Aires es el Complejo Histórico Cultural Manzana de las Luces. Se encuentra a pocas cuadras de la Plaza de Mayo y es un conjunto de edificios que ocupa una manzana completa delimitada por las calles Perú, Moreno, Alsina y Bolívar. Su nombre proviene de las instituciones educativas, científicas y culturales que se establecieron allí desde los tiempos coloniales, convirtiéndolo en un verdadero foco de «luces», es decir, de ilustración y saber.
La historia de la Manzana de las Luces comienza en el siglo XVII, cuando los jesuitas construyeron en el lugar el Colegio de San Ignacio, la Iglesia de San Ignacio de Loyola (la más antigua de Buenos Aires) y varios claustros destinados a la enseñanza y la vida religiosa. Tras la expulsión de la orden en 1767, los edificios pasaron a manos del Estado y se transformaron en sede de importantes instituciones del nuevo país: funcionaron allí la Universidad de Buenos Aires, el Museo de Ciencias Naturales, la Biblioteca Nacional y el Congreso Nacional, entre otros organismos.
Hoy, la Manzana de las Luces funciona como un espacio cultural y museo, dependiente del Ministerio de Cultura de la Nación, y se organizan exposiciones, conferencias, ferias artesanales y visitas guiadas gratuitas.

Café Tortoni
Caminando por la Avenida de Mayo te encontrarás con numerosos edificios históricos que admirar y lugares interesantes como el Café Tortoni, uno de los cafés más antiguos y emblemáticos de la ciudad. Fue fundado en 1858 por un inmigrante francés y desde entonces ha sido punto de encuentro de artistas, escritores, músicos y pensadores. Su nombre se inspiró en un famoso café de París, y su ambiente, con muebles de madera oscura, lámparas de bronce, vitrales de colores y mesas de mármol, conserva intacto el encanto de otra época.
A lo largo de su historia, el Café Tortoni ha sido escenario de la vida cultural porteña. Por sus mesas pasaron figuras ilustres como Jorge Luis Borges, Alfonsina Storni, Carlos Gardel, Federico García Lorca y Julio Cortázar, quienes encontraron allí un espacio para debatir ideas, escribir o simplemente disfrutar de un café con medialunas. En su interior funcionó durante años la Peña del Tortoni, un círculo literario y artístico que fomentó la creación y el intercambio cultural. Hoy, el café sigue ofreciendo espectáculos de tango y jazz en su salón subterráneo, manteniendo viva la tradición de la bohemia porteña.

Calle Florida
La Calle Florida es una de las arterias más emblemáticas y concurridas del centro de Buenos Aires. Es totalmente peatonal y atraviesa la ciudad desde la Plaza San Martín hasta la Avenida de Mayo. Surgió en el siglo XIX como una de las calles más elegantes de la capital, donde se instalaban las tiendas más distinguidas y los primeros cafés modernos.
Sus edificios conservan la arquitectura clásica de principios del siglo XX, con galerías comerciales que son verdaderos íconos de la ciudad, como la Galería Güemes, la Galería Jardín o la Galería Boston. Ahora bien, quizá la más famosa sea Galerías Pacífico.
Esta galería comercial fue inaugurada en 1896 para ser originalmente sede de la tienda Au Bon Marché, inspirada en los grandes almacenes parisinos. En su interior podrás ver murales de reconocidos artistas argentinos, como Antonio Berni y Lino Enea Spilimbergo. Además, no solo albergan tiendas de moda y restaurantes, sino también el Centro Cultural Borges, donde se realizan exposiciones de arte, talleres y espectáculos.

Confitería La Ideal
Y hablando de lugares elegantes, no puedes dejar de pasar por la Confitería La Ideal. Fue fundada en 1912 por un inmigrante español y desde entonces ha sido un punto de encuentro tradicional para quienes buscan disfrutar de un café, un pastel o un buen tango en un ambiente de época. Su arquitectura y decoración de estilo art nouveau y neorrenacentista, con vitrales, lámparas de bronce, mármoles y boiseries de madera tallada, la convirtieron en uno de los cafés más refinados de la ciudad.
Durante gran parte del siglo XX, La Ideal fue sinónimo de vida social y cultural en Buenos Aires. Por sus mesas pasaron escritores, políticos, artistas y tangueros, y además de funcionar como confitería, se hizo famosa por su salón de baile, donde se realizaban milongas y clases de tango.
Tras cerrar sus puertas durante varios años por problemas estructurales, la Confitería La Ideal fue restaurada y reabrió en 2022. Hoy se puede disfrutar de un café o una comida en su confitería principal, asistir a una milonga nocturna o simplemente admirar su bonita arquitectura.

Avenida 9 de Julio
A pocos pasos te encontrarás con la Avenida 9 de Julio, una de las arterias más emblemáticas de Buenos Aires. Con sus más de 140 metros de ancho y varias calzadas separadas por jardines, monumentos y plazas, atraviesa el corazón de la ciudad de norte a sur y conecta algunos de sus puntos más importantes, como la Plaza Constitución, el Obelisco y la Avenida del Libertador. Su nombre conmemora el Día de la Independencia Argentina (9 de julio de 1816).
La idea de construir la avenida surgió a comienzos del siglo XX, inspirada en los grandes bulevares de París, aunque las obras no se completaron hasta varias décadas después, debido a la complejidad de expropiar y reorganizar una parte tan céntrica de la ciudad. Finalmente, la Avenida 9 de Julio fue inaugurada oficialmente en 1937.
Obelisco
El Obelisco de Buenos Aires es todo un símbolo de la ciudad y se alza en la intersección de la Avenida 9 de Julio y la Avenida Corrientes. Fue inaugurado en 1936 para conmemorar el cuarto centenario de la primera fundación de Buenos Aires por Pedro de Mendoza, y desde entonces se ha convertido en un ícono de la identidad porteña y un punto de encuentro en los grandes acontecimientos nacionales.
El monumento fue diseñado por el arquitecto Alberto Prebisch, una de las figuras más importantes del modernismo argentino. Fue construido en apenas 31 días y mide 67,5 metros de altura. En su base se pueden leer las fechas más importantes de la historia de la ciudad, y en su interior una escalera de 206 peldaños conduce hasta la cúspide, donde hay una pequeña ventana con vistas panorámicas del centro porteño (aunque no está abierta al público).
Más allá de su valor arquitectónico, el Obelisco es sobre todo un símbolo cultural y emocional. A su alrededor se celebran los triunfos deportivos, las manifestaciones populares, los conciertos al aire libre y los actos políticos. Es habitual ver el monumento iluminado con distintos colores para conmemorar fechas especiales o causas sociales.

Teatro Colón
Muy cerca de allí se ubica otro lugar muy conocido de la capital argentina: el Teatro Colón. Su monumental edificio combina estilos neoclásico e italiano, con una bonita fachada, una gran cúpula decorada con frescos y un interior lujosamente ornamentado con mármoles, dorados y vitrales.
La historia del Teatro Colón refleja el esplendor de la Buenos Aires de comienzos del siglo XX, cuando la ciudad vivía una época de prosperidad y buscaba equipararse con las grandes capitales europeas. Su construcción llevó casi veinte años y estuvo a cargo de destacados arquitectos, entre ellos Francisco Tamburini y Vittorio Meano, quienes también participaron en el diseño de otros edificios emblemáticos como la Casa Rosada y el Congreso Nacional.
Fue inaugurado en 1908 con la ópera Aida de Verdi, y desde entonces el Colón ha recibido a las figuras más importantes de la música clásica y el ballet: Luciano Pavarotti, Plácido Domingo, Maria Callas, Mikhail Baryshnikov, Rudolf Nureyev y muchos más han pasado por su escenario.
El teatro cuenta con una sala principal con capacidad para más de 2.400 espectadores, dispuesta en siete niveles de palcos y butacas tapizadas en terciopelo rojo, con una cúpula pintada por el artista argentino Raúl Soldi. Además, el Colón alberga talleres de producción, salas de ensayo y una escuela de formación artística que nutre a nuevas generaciones de músicos y bailarines, y se puede conocer con una visita guiada.

Club Español
Caminando por la Avenida 9 de Julio me llamó mucho la atención un edificio de estilo arabesco, y mi sorpresa fue mayúscula cuando vi un cartel en la puerta que decía «Club Español». No llegué a entrar porque parecía cerrado, pero he visto fotos y por dentro es espectacular. Hacen visitas guiadas de vez en cuando, así que revisa sus redes sociales por si coincide con tu viaje.
Fue inaugurado en 1911 como sede social de la comunidad española residente en Argentina, que por entonces era una de las más numerosas y activas del país. El edificio fue diseñado por el arquitecto Enrique Folkers y es una obra maestra del estilo modernista catalán con sus balcones de hierro forjado, mosaicos, arcos y esculturas alegóricas.

Mural de Evita
Un poco más hacia el sur, siguiendo en la Avenida 9 de Julio, podrás ver uno de los íconos contemporáneos más conocidos de Buenos Aires. Se trata del homenaje a Eva Perón, decorando las dos fachadas del Edificio del Ministerio de Salud.
Fue inaugurado en 2011 en conmemoración del 59º aniversario de su fallecimiento y la obra, realizada por el artista Alejandro Marmo, representa a Evita en dos versiones contrapuestas: una con gesto combativo y un micrófono en la mano y otra con una expresión serena y sonriente. La estructura mide 31 metros de alto y de noche las imágenes se iluminan.

Palacio Barolo
Dejando atrás la avenida, te propongo volver a la Avenida de Mayo para ver el Palacio Barolo. Fue inaugurado en 1923 y durante muchos años fue el edificio más alto de Sudamérica, con sus 100 metros de altura coronados por un faro visible desde el Río de la Plata. Su construcción fue encargada por el empresario textil italiano Luigi Barolo al arquitecto Mario Palanti, quien concibió una obra inspirada en la Divina Comedia de Dante Alighieri, transformando el edificio en una alegoría arquitectónica del cielo, el infierno y el purgatorio.
Y es que cada parte del edificio tiene un significado simbólico: el infierno se representa en los primeros pisos, el purgatorio en los niveles intermedios y el paraíso en la cúpula, donde se encuentra el faro. Además, el edificio tiene 22 pisos y 11 balcones por fachada, números que coinciden con las estrofas del poema de Dante, y una organización que reproduce la estructura del universo según la cosmología medieval. La torre central, rematada con una cúpula en forma de flor de loto, simboliza la unión entre el cielo y la tierra.
Por si fuera poco, el Palacio Barolo de Buenos Aires tiene un hermano gemelo al otro lado del Río de la Plata: el Palacio Salvo, en Montevideo. Fue diseñado por el mismo arquitecto y fue construido por los hermanos Salvo, también de origen italiano, quienes quedaron fascinados con la obra porteña y quisieron replicar su magnificencia en la capital uruguaya.

Congreso de la Nación argentina
Para terminar la ruta por el Centro de Buenos Aires, nada mejor que ir hasta el final de la Avenida de Mayo. Allí verás unos bonitos jardines que esconden algunos monumentos, como la réplica de El Pensador de Rodin o el Monumento a los Dos Congresos, reconocible por su escalinata, su fuente y la estatua que representa la República. Detrás, el edificio del Congreso de la Nación, uno de los Congresos más grandes del mundo.
Su construcción comenzó en 1897 bajo la dirección del arquitecto italiano Vittorio Meano y fue inaugurado oficialmente en 1906. El edificio es un magnífico ejemplo del estilo neoclásico, con una fachada principal flanqueada por columnas corintias y decorada con esculturas alegóricas que representan la República, la Justicia y la Paz.
El Congreso alberga las dos cámaras que conforman el poder legislativo: la Cámara de Diputados y el Senado de la Nación. En su decoración destacan los mármoles de Carrara, bronces, vidrieras, frescos o mobiliario de época, además del Salón Azul, inspirado en el Palacio de Versalles, y la Cúpula central, que se eleva 80 metros. Para conocerlo, puedes hacer una visita guiada gratuita.

Cómo llegar al centro de Buenos Aires
Llegar al centro de Buenos Aires es muy sencillo, ya que es la zona mejor comunicada de toda la ciudad. Mi consejo es que tengas a mano Google Maps, ya que te vendrá bien para conocer cómo ir de un lugar a otro y en qué medio de transporte. Recuerda hacerte con la tarjeta SUBE y recargarla para poder tomar tanto colectivos como el Subte.
Ir al centro de Buenos Aires en Subte
El medio más práctico es el Subte (metro), que conecta casi todos los barrios porteños con el centro. Las líneas A, B, C, D y E tienen estaciones en esta zona:
- La Línea A (azul claro) recorre la Avenida de Mayo y llega directamente a lugares como el Cabildo o la Plaza del Congreso. Sus paradas más céntricas son Perú, Piedras y Congreso.
- La Línea B (roja) atraviesa la Avenida Corrientes y te deja junto al Obelisco y el Teatro Colón. Las estaciones principales son Uruguay, Carlos Pellegrini y Callao.
- La Línea C (azul oscuro) conecta las terminales de trenes Retiro y Constitución, pasando por el corazón de la ciudad. Sus paradas más importantes en el centro son Diagonal Norte y Avenida de Mayo, donde se puede combinar con otras líneas.
- La Línea D (verde) también pasa por el área central con estaciones como 9 de Julio y Tribunales, ideales para llegar al Obelisco o al Palacio de Justicia.
- La Línea E (violeta) cruza el sur del centro y tiene paradas como Bolívar, cercana a la Plaza de Mayo, y Entre Ríos, cerca del Congreso.
Todas las líneas del Subte están conectadas entre sí en el centro, especialmente en el nudo de combinación entre las estaciones Perú, Catedral, Diagonal Norte y 9 de Julio, lo que permite moverse fácilmente a cualquier punto de la ciudad. El servicio funciona de lunes a sábado hasta alrededor de las 23:00 y los domingos hasta las 22:00.

Líneas de colectivos al centro de Buenos Aires
Además del metro, circulan decenas de líneas de colectivos (autobuses urbanos) que pasan por las avenidas principales: Corrientes, Rivadavia, Belgrano, Paseo Colón o 9 de Julio. Algunas de las líneas más útiles para llegar al centro son la 9, 10, 17, 24, 29, 45, 59, 60, 86, 100, 105 y 152, entre muchas otras.
El Metrobús 9 de Julio es una vía exclusiva para colectivos que atraviesa todo el centro con paradas cerca del Obelisco, el Teatro Colón y la Plaza de la República, lo que facilita moverse rápidamente incluso en horas pico.
Dónde dormir en el centro de Buenos Aires
A la hora de dormir, el centro de Buenos Aires es una excelente opción para quienes quieren estar cerca de todo. Desde tu alojamiento podrás moverte fácilmente a pie o en metro hasta muchos de los principales monumentos de la ciudad y otros barrios cercanos.
Uno de los alojamientos en los que me quedé durante mi estancia en la ciudad fue el BA Stop Hostel. El hostel tiene un ambiente muy agradable y social, perfecto para conocer a otros viajeros, y habitaciones tanto compartidas como privadas. Está bien ubicado y cuenta con cocina común y un personal muy amable que brinda información turística y organiza actividades.
Si prefieres otras opciones, aquí te dejo un mapa donde puedes ver qué alojamientos hay disponibles en la zona y sus precios:
Como ves, hay un montón de lugares que visitar en el centro de Buenos Aires, así que toma buena nota y planea dedicar un día a recorrerla con calma. La historia, la cultura y la arquitectura se dan cita entre sus calles y están esperándote. Además, muy cerca hay otros barrios que también merece la pena conocer, como San Telmo, Puerto Madero, Balvanera o Almagro. ¡Comienza a planear tu viaje ya!
Este artículo pertenece a la guía para viajar sola a Argentina
Viajera y fundadora de Quiero Viajar Sola. Desde que comencé a viajar sola en 2016 siempre tuve una inquietud: motivar a otras mujeres a viajar solas. Para ello, decidí crear este blog en 2018, en el que te cuento todos los viajes que he realizado en solitario en estos 9 años como viajera independiente y te doy consejos para que puedas organizar tu viaje por libre y disfrutar recorriendo el mundo en solitario.

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En estos 8 años viajando sola por todo el mundo he recorrido muchos países y destinos de los que puedo darte consejos en base a mi experiencia. Puedo recomendarte lugares para visitar, dormir, cómo moverte, etc., y eso es lo que encontrarás en cada artículo de este blog de viajes. Complemento la información con mis redes sociales, sobre todo Instagram, donde puedes ver casi en tiempo real los lugares por los que viajo sola cada vez que estoy en una nueva aventura.
Además, este blog ha sido galardonado en varias ocasiones (entre los premios recibidos están el Premio a la Mejor Marca Personal en Viajes y Turismo en los Premios Día de Internet en 2024 y el Premio 20Blogs al Mejor Blog de Viajes en 2021) y he aparecido en numerosos medios de comunicación, tanto en España como en Latinoamérica (El País, La Sexta Noticias, ELLE Argentina, El Sol de México, Radio Marca…).
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